Por lo menos sabía cual era la intensión del juego:
Los hombrecitos debían colocar el balón luego de la raya blanca que era la frontera entre el campo de juego y el arco con mallas.También sabía que cuando eso ocurriera tenía que gritar ¡¡GOL!!!
Se sentía extraño, como que algo malo estaba apunto de pasar. Pero al mismo tiempo veía a su alrededor, todos muy animados y con una sonrisa en la cara, aunque al mismo tiempo insultaran a los pobres hombrecitos dentro de la pantalla. Encontraba una simple contradicción.
Bueno, luego de pensarlo cinco segundos lo entendió, sabía que el alcohol causaba un ligero adormecimiento y una clara desinhibición.
El partido sigue, siguen los insultos, solo espera poder sentir el gritar ¡¡GOL!!! Sigue tomando, juega con un cigarro en los dedos, le da muchas vueltas, lo observa...y, ¡¡al fin llega el momento tan esperado!! ¡¡¡¡GOL!!!! ¡¡¡¡GOL!!!!!!
---- CALLA MIERDA!!!! ------
No podremos nunca saber que sintió al gritar aquella anotación.
Q.E.P.D.
1 comentario:
Algun dia tambien he de espectar un partido de futbol tomando algun licor solo para intentar comprender todo ese afan innecesario. Total, aca juegan hasta el culo entonces esta demas que mi profesor no quiera dictar por ver un partido que vamos a perder... pensar que puede pasarse toda la vida hablando de filosofia del futbol peruano! Mi vida es mas divertida.
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